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En los últimos años, un objeto se ha convertido en uno de los grandes aliados de la mujer durante la menstruación: la copa menstrual. Lo que comenzó siendo un nuevo universo que explorar y experimentar, ha terminado transformando para siempre el periodo de la mujer, y por ende, su forma de vivirlo y concebirlo. La copa menstrual es una alternativa a las compresas y tampones de toda la vida, que cada vez ha ido ganando más y más adeptas entre las mujeres en edad fértil.

Si nos remontamos a la historia y los orígenes de la copa menstrual, lo cierto es que no podemos atribuirle su uso y creación al siglo vigente. La utilización de la copa menstrual entre las mujeres se remonta al año 1867, aunque no fue hasta la década de 1930 cuando se presentó la patente de la copa menstrual. Una de las grandes diferencias entre las copas menstruales del siglo XIX y XX y las actuales se encuentra en su composición. Hoy en día, el material empleado en su fabricación es la silicona médica, que sustituye al látex con el que se elaboraban las copas menstruales de siglos pasados.

Son muchas las ventajas y beneficios que aporta el uso de la copa menstrual, que la han convertido en una de las grandes opciones para la mujer durante su menstruación. Entre las ventajas de la copa menstrual, destacan varios factores que la hacen única y la convierten en uno de los recursos más demandados para hacer frente al sangrado propio del periodo menstrual:

Su comodidad.

Su salubridad.

Su reutilizabilidad.

Su bajo coste.

Su compatibilidad con el ecologismo y el cuidado del medio ambiente.

Su versatilidad, capaz de adaptarse a mujeres de toda edad y condición.

Entre las ventajas más valoradas por las mujeres a la hora de dar el paso hacia el uso continuado de la copa menstrual, se encuentra la funcionalidad de poder llevarla en el interior de la vagina durante 12 horas. Otra de sus propiedades más valoradas es su largo ciclo de vida. Si se llevan a cabo los cuidados y las medidas de higiene pertinentes, la copa menstrual puede tener un tiempo de vida de hasta 15 años. Además, la copa menstrual ayuda a prevenir enfermedades que pueden ocasionar el uso de compresas y tampones, como la candidiasis o la cistitis.

En cuanto a su forma de uso, pese a que al principio puede parecer complicada la introducción de la copa menstrual en la vagina, con la práctica será un proceso rápido y automático. La mujer debe doblar la copa menstrual e introducirla en el interior de su vagina, donde recuperará su forma natural y desempeñará íntegramente su función. Existen varias tallas de copa menstrual disponibles en el mercado, que se adaptan a la condición física y a la demanda de cada mujer.

Si tienes dudas sobre el uso de la copa menstrual, llama a nuestra clínica ginecológica y te ayudaremos con todo lo que necesites. Te atendemos en el teléfono 917 375 222. También puedes pedir cita online a través de nuestra web.