El buen tiempo está llegando y se aproximan fechas de vacaciones para todos. Si estás embarazada y vas a salir de viaje, habrás oído que hay que tener en cuenta ciertos factores y que no es recomendable en algunos momentos del embarazo (durante el primer trimestre y el último no se recomiendan largos desplazamientos), aunque para nada es un impedimento.
Desde AGE queremos que te sientas segura a la hora de viajar y, por eso, vamos a resolverte algunas dudas y a darte varios consejos que puedes seguir para tener unas vacaciones de ensueño.
Como paso previo, te animamos a planificar tu viaje con tiempo para reducir las situaciones de estrés que puedan suponer las prisas o imprevistos de última hora.
- En primer lugar, siempre que el embarazo se desarrolle con normalidad, no haya hemorragias ni sangrados vaginales, amenaza de aborto, o la fecha del parto se aproxime (a partir de la semana 38), no hay ningún problema a la hora de viajar. Eso sí, debes asegurarte de que el lugar de destinto tenga una buena seguridad sanitaria y tener en cuenta factores como la duración del viaje o el medio de transporte.
- Además, es necesario que lleves contigo toda la documentación sanitaria sobre el embarazo (análisis, ecografías, informes, etc).
- El período de menos riesgo para emprender un viaje es el segundo trimestre de embarazo, a partir de la semana 18ª, ya que el embrión ha superado las dificultades de implantación y los cambios físicos no incomodan demasiado a la embarazada.
- Si vas a viajar en tren, en avión o en autobús, elige un lugar cerca del baño y junto al pasillo. La mayoría de las compañías aéreas ponen restricciones a las embarazadas de más de siete meses para evitar la posibilidad de que se presente un parto durante el vuelo.
- El barco no es muy recomendable, sobre todo en los primeros meses, debido a posibles mareos y naúseas. Y el autobús tampoco debido al pequeño espacio del que se dispone.
- El coche se recomienda para viajes cortos.
- Evita estar mucho tiempo sentada e intenta estirar las piernas cada cierto tiempo o cambiar de posición. Si vas en coche, debes parar cada dos horas y relajarte unos minutos antes de seguir.
- Bebe mucha agua durante el trayecto y viste ropa cómoda (que no apriete, zapatos sin tacón y alguna chaqueta para los cambios de temperatura).
- En desplazamientos largos puede venir bien una almohada para la espalda.
- Para evitar posibles mareos, lleva a mano algo de glucosa o algún alimento.
- No se recomienda viajar a sitios de más de 3.000 metros de altura, ni a zonas donde exista riesgo de contraer alguna enfermedad o que requieran vacunas que puedan suponer un riesgo.
Una vez en el lugar de destino es importante seguir algunos consejos:
- Protégete del sol.
- No practiques actividades arriesgadas.
- Realiza ejercicio físico.
- Lleva a cabo una buena alimentación y bebe mucha agua. Evita las comidas pesadas y las grasas e intenta respetar los horarios. Si viajas a otros países bebe sólo agua embotellada.
- Sé más estricta con tu higiene. Puedes llevar en el bolso un desinfectante de manos.
- Procura dormir bien y cómodamente.
- Viste prendas ligeras, amplias y cómodas. Protégete de las infecciones vaginales poniéndote ropa seca cuando subas de la playa o la piscina.